El Tardón es uno de los barrios que forman parte del distrito de Triana, en Sevilla. Ubicado en la zona suroeste del distrito, limita al norte con el Barrio León, al este con Triana, al sur con Los Remedios, y al oeste con la barriada del Carmen.
Este barrio, lleno de historia y vida, es un ejemplo perfecto de cómo la tradición y la modernidad pueden coexistir en armonía.
Historia del Barrio del Tardón en Sevilla
La denominación de El Tardón tiene una rica historia que se remonta a tiempos antiguos. A diferencia de lo que algunos piensan, el nombre no proviene de la tardanza en la construcción del barrio o del autobús.
En 1868, el Ayuntamiento nombró a una barreduela como Espronceda, en homenaje al poeta, cerca de la actual Alfalfa, que antes era conocida como Plaza del Tardón. Este nombre provenía de una casa apeadero de los frailes basilianos en la zona.
Con el tiempo, los monjes se trasladaron a los trigales del Cortijo del Aceitero, el área donde eventualmente se establecería El Tardón.
La congregación de los Yermos del Tardón y el Convento de Nuestra Señora del Buen Suceso contribuyeron a que el nombre perdurara hasta nuestros días.
En el siglo XIX, la zona adyacente a la Vega de Triana fue testigo de un auge de tejares, donde se producían tejas, cerámicas y ladrillos. Estas fábricas, junto con la alfarería, prosperaron durante años, convirtiéndose en pilares económicos de la región.
Sin embargo, con el tiempo, estas actividades dejaron de ser rentables, lo que llevó a la venta de los terrenos.
Estos tejares y alfarerías contribuyeron al desarrollo económico de la zona, atrayendo a trabajadores y fomentando la creación de una comunidad que eventualmente se convertiría en el barrio de El Tardón.
En 1957, hubo un acuerdo para que El Tardón se denominara barrio Virgen de la Esperanza, pero el nombre se cambió por barriada de San Gonzalo.
En las calles Alvar Núñez y Juan Díaz de Solís, todavía pueden verse azulejos que llevan este nombre, lo que refleja la historia y las transformaciones del barrio a lo largo de los años.
Mercado Inmobiliario
El Tardón comenzó a tomar forma oficialmente en 1952, como resultado del gran éxodo del campo a la ciudad entre 1939 y 1956, lo que llevó a un crecimiento significativo de la población en Sevilla.
El Instituto Nacional de la Vivienda decretó la creación del barrio para alojar a las familias desalojadas de sus antiguas viviendas del casco histórico.
Los dos bloques principales del barrio fueron diseñados por el arquitecto técnico asturiano Luis Fonseca, quien era jefe del Instituto Nacional de la Vivienda en aquella época.
La primera fase de construcción fue entregada en 1955 y la segunda en 1957. Las constructoras encargadas de las obras fueron diversas, bajo la supervisión de la Obra Nacional.
Antes de la construcción oficial del barrio, el área albergaba una serie de chabolas levantadas por personas, algunas de las cuales eran ladronzuelos.
En los años 1940-1950, estas personas levantaron sus viviendas en el antiguo Tejar del Mellizo. En 1952, el estado y el ayuntamiento decidieron transformar esta zona en una barriada de pisos de protección oficial.
Se construyeron alrededor de dos mil viviendas sociales, cada una con entre dos y tres dormitorios, cocina, salón y baño, y una superficie de entre 42 y 70 metros cuadrados.
Estos edificios de fachadas rojas y blancas fueron diseñados con una calidad notable para la época.
Cada bloque consta de un bajo y cuatro plantas, proporcionando una estructura uniforme y reconocible.
Con el nuevo milenio, algunos de los bloques de pisos más grandes, que contaban con patio interno, añadieron ascensor, mejorando aún más la calidad de vida de los residentes.
El diseño morfológico-urbanístico del barrio es perfecto en su distribución, comprendido por calles que rinden homenaje a figuras históricas y literarias.
Entre ellas, Alvar Núñez, en honor al conquistador del siglo XVI; Rubén Darío, el poeta modernista nicaragüense; Juan Díaz de Solís, el descubridor del Río de la Plata; Francisco López de Gómara, cronista de la conquista de México; y Lorenzo Leal, el poeta y novelista sevillano del siglo XIX.
Infraestructuras y Servicios
El Tardón cuenta con una infraestructura bien desarrollada. Las principales vías del barrio son la avenida Alvar Núñez y la calle Juan Díaz de Solís, que se cruzan perpendicularmente con Lorenzo Leal y Rubén Darío.
En 1965, se inauguró la parroquia de San Joaquín, que inicialmente estaba en un pequeño local comercial en la plaza de Góngora.
Antes de ser asfaltado a comienzos de los 2000, al llover se formaban charcas y barrizales en el suelo terrizo donde incluso aparcaban los coches.
Este detalle, aunque menor, refleja los desafíos y las mejoras que el barrio ha experimentado a lo largo del tiempo.
Conexiones
En términos de conexiones de transporte, El Tardón está bien comunicado con el resto de Sevilla.
Las líneas de autobús que sirven al barrio incluyen la 05, 38A, LE, M-122, B4, 22, B3, 32, A4 y 52.
Además, el barrio cuenta con dos paradas de metro cercanas: Parque de los Príncipes y Blas Infante, facilitando el acceso al centro y otras zonas de la ciudad.
Como curiosidad tenemos que mencionar que el barrio cuenta con una réplica del tranvía que circulaba por Triana, añadiendo un toque de nostalgia y funcionalidad a la vida diaria.
Espacios verdes y Deporte
Para aquellos que disfrutan de los espacios verdes, el Parque de los Príncipes es una opción ideal.
Este parque ofrece un lugar para relajarse, pasear y disfrutar del aire libre, siendo un pulmón verde para los residentes de El Tardón.
En cuanto a las instalaciones deportivas y educativas, el barrio cuenta con el Centro Deportivo Mar del Plata, que ofrece diversas actividades y servicios para los residentes.
Educación
Además, hay varias instituciones educativas, como el Centro de Educación Infantil Rubén Darío, el IES Gustavo Adolfo Bécquer y el CEIP Alfares, que proporcionan una educación de calidad a los niños y jóvenes del barrio.
Cultura y Tradiciones
El Tardón no solo es un lugar para vivir, sino también un barrio lleno de vida y tradiciones.
La cultura y la historia están profundamente arraigadas en la comunidad.
Cocina
Uno de los puntos de encuentro más destacados es El Tardón Triana, un establecimiento de barrio donde se pueden disfrutar de tapas caseras en un ambiente de cercanía y buena vecindad.
Este bar de tapas, que comparte local con la sede de la Asociación de Vecinos, es un lugar popular para los residentes.
Junto al bar, hay una zona de columpios para que los niños puedan divertirse mientras los adultos disfrutan de una bebida o una tapa.
Carnaval
El barrio de Triana celebra cada año esta fiesta pagana organizada por la Asociación de Vecinos El Tardón en la Plaza Cerámicas Mensaque.
Esta celebración es un reflejo de la vibrante vida social y cultural del barrio, donde los vecinos se unen para celebrar y disfrutar de diversas actividades.
Fiestas Religiosas
Los niños también participan activamente en las tradiciones locales, como las cruces de mayo, una celebración llena de color y alegría.
Además, los vecinos viven intensamente la Semana Santa con la Hermandad de San Gonzalo y las glorias de la Virgen del Rosario, eventos que son parte esencial de la vida comunitaria en El Tardón.
Feria de Sevilla
Finalmente, la Feria de Sevilla, uno de los eventos más importantes de la ciudad, está a solo 15 minutos a pie de la calle del Infierno, donde se encuentran las atracciones de la feria.
Esta proximidad permite a los residentes disfrutar fácilmente de las festividades y el ambiente.
Los artistas del barrio del Tardón en Sevilla
Además, el barrio ha visto nacer a figuras insignes como Isabel Pantoja, Los Morancos, Chiquetete y Lole y Manuel, lo que añade un toque de orgullo local a sus calles.
Estas figuras son parte integral de la identidad cultural de El Tardón, y su influencia se siente en la vida diaria del barrio.
Conclusión
El Tardón es un barrio que captura la esencia de Sevilla: su historia, su cultura y su gente.
Con su ambiente acogedor, sus servicios de calidad y su vibrante vida social, es un lugar ideal para aquellos que buscan una vida tranquila pero llena de carácter.
Si estás considerando mudarte a Sevilla, no dejes de visitar El Tardón.
Te sorprenderá con su encanto y su calidez, haciendo que te sientas en casa desde el primer momento.